¡LOS RESIDENTES DEL DISTRITO CHAHARDARA, ATRAPADOS ENTRE EL FUEGO DE LAS FUERZAS ESTADOUNIDENSES, TALIBANES Y EL GOBIERNO DEL “TERROR NACIONAL”!
- Categoría: Artículo
- Escrito por Escrito por Behrooz Poyan
- Publicado: Viernes, 10 Noviembre 2017
Hace días que, se puso en marcha una “operación militar de limpieza” por parte de las fuerzas de ocupación estadounidense, junto con el Estado de Terror Nacional contra los talibanes, en diferentes aldeas del Distrito Chahardara situado en la provincia de Kunduz. La más terrible consecuencia es que la gente inocente de las aldeas de Qatle-Aam, Ghruqshalaq, Sar-Aasyab e Isaa Khil (habitadas por uzbekes, tadyikes y pashtunes) han perdido a sus seres queridos, y se han tenido que desplazar abandonando sus hogares y se han refugiado en las aldeas adyacentes, relativamente seguras. Debido a que los talibanes en la aldea Qatle-Aam convirtieron las casas de la gente en sus trincheras, durante el bombardeo nocturno de las fuerzas extranjeras, éstas fueron incendiadas y su gente ha perdido todo lo que tenía allí.
Por otra parte, la mayoría de la gente mayor para poder vigilar sus casas, se ven obligados a vivir bajo una lluvia de pólvora y fuego entre las partes implicadas en el conflicto. Aun así, durante una semana de guerra que ha pasado por todas las calles, la mayoría de las casas de la gente fueron incendiadas y sus pertenecientes y ganado fueron saqueados. Hay otra parte de la población que no tiene ninguna noticia de los miembros de su familia, ya que cada uno tuvo que escapar del horror a otros lugares, para intentar ponerse a salvo.
Uno de los residentes locales que, por tener miedo a las amenazas no divulga su nombre, dice:
“Hoy (4 de noviembre de 2017) a las 06:00 de la madrugada, para recuperar los muertos talibanes durante el bombardeo de la aldea Qatle-Aam los talibanes reclutaron a un grupo de jóvenes residentes en Ghroqshalaq mediante amenazas y coerción. Solo algunos jóvenes del grupo, presentaron diferentes pretextos y consiguieron escapar de las garras de los talibanes. No obstante, el resto del grupo reclutado que iba hacia la aldea Qatle-Aam fueron el blanco de “drones” norteamericanos. Como consecuencia, fueron asesinados 14 miembro del grupo juvenil y otros 7 fueron gravemente heridos, incluyendo también a los niños. Estos civiles asesinados tenían sólo entre 16 y 26 años y la mayoría de ellos tenía una profesión o eran peones, los únicos que mantenían a sus familias.”
Según los testigos locales, los morteros del Estado del Terror Nacional y el bombardeo de las fuerzas invasoras norteamericanas provocaron la pérdida de vida civil y la ruina de su hogar en las aldeas de Sar-Aasyab, Qatle-Aam, Ghroqshalaq, Isaa Khil, Wardak y Khorwat. En otra ocasión, la noche del 4 de noviembre, fueron tomadas por los sanguinarios talibanes. Además, para protegerse, la sufrida gente de dichas aldeas pasa el días y la noche en las mezquitas de otras aldeas vecinas.
Aunque todas las casas de las aldeas mencionadas están destruidas, cualquier hombre que va a su aldea para echar un vistazo a su casa, vuelve lamentandose y con los ojos llenos de lágrimas por haber perdido todas sus pertenencias. Como muestra, nos detenemos en los casos de algunas víctimas civiles:
Shir Mohamed residente de la aldea Qatle-Aam que, tras trabajar duramente durante muchos años, consiguió construir una casa de varias habitaciones que durante una explosión de morteros fue convertida en cenizas.
Mohamed Shah, uno de los más pobres residentes de la aldea Qatle-Aam, que hacía un mes había enviado a su hijo joven a Turquía para trabajar, fue asesinado por la policía fronteriza iraní mientras cruzaba la frontera, aún estaba de luto cuando los norteamericanos bombardearon su casa y la convirtieron en una ruina y tuvo que desplazarse a otro distrito llamado Qala-e-Zal.
Mohamed Rasool, otro trabajador que mediante duros trabajos como campesino, pudo ganar algo de dinero para comprarse una pequeña máquina de algodón y la instaló en su aldea. Mientras tenía algodones de sus clientes en su taller, por un valor de unos 2 millones de afgani pendiente de tratar, durante el bombardeo nocturno su taller fue quemado. Él, al ver lo que había ocurrido y la pérdida de todas las cosas, con los ojo llenos de lágrimas abandonó aquel sitio.
También fueron convertidas en ruinas las casas de Hossain Soofi, Ghani, Ismael, Mozafar y otros cuantos más.
Los que consiguieron salir con vida de esas horribles incursiones, dicen que éstas tienen fines exhibitorios y tienen como objetivo aniquilar a la gente, porque cuando arrestan a una milicia de talibanes, al cabo de un tiempo son dejados en libertad, para luego seguir cometiendo crímenes. Además, bajo el pretexto de la “operación militar de limpieza” de la zona, la gente se ve obligada a abandonar sus casas, pero pasados unos cuantos días, las fuerzas gubernamentales se retiran de la zona y otra vez los talibanes retoman el territorio. Hace años que los residentes de Chahardara están siendo masacrados en éste brutal juego.