¡ZIAULDIN Y ENAYATULAH FUERON ASESINADOS POR ATROCES MILITARES ALEMANES!
- Categoría: Artículo
- Escrito por Khalil
- Publicado: Domingo, 25 Diciembre 2016
ENAYATULAH Y ZIAULDIN
El 10 de noviembre de 2016, a las 23:05h (hora local) se produjo una explosión terrible en la ciudad de Mazar. La explosión ocurrió concretamente frente al consulado alemán situado en el Hotel Mazar. El impacto de esa explosión fue tan fuerte, que dispersó fragmentos de edificios y coches hasta 1 kilómetro de distancia. Las viviendas y los centros comerciales situados a menos de 500 metros del consulado fueron gravemente dañados. Numerosos edificios de la ciudad sufrieron desperfectos, la mayoría se quedaron sin cristales por la detonación. Los daños materiales se calculan en millones de dólares, ya que la mayoría de los centros comerciales de Mazar están situados en esa localidad, sobre todo el mercado farmacéutico Aryana, la Casa de Invitados de Mazar, el Mercado de Bigzada, Ansari, Katebzada, Nezam y el Mercado de Shahzada. Las tiendas situadas delante del consulado y centenas de casas en el paso de Baba Qambar, Chahqzadak y Shadiyan también fueron destruidas.
A diferencia de las declaraciones de los portavoces del Gobierno, las cifras de civiles fallecidos ascienden a más de 20 y el número de heridos supera las 200 personas. Con las mentiras de siempre, el gobierno anunció que el incidente se debía a la explosión de un coche bomba.
La gente que vive en la localidad afectada, declaró haber visto primero una luz deslumbrante en el este de la ciudad, y después se produjo en ese mismo lugar una explosión, seguido de un sonido horrible, como si fuese un cohete, destruyendo gravemente la zona. Ningún alemán ha recibido lesión alguna, ya que normalmente los diplomáticos pasan las noches en el campamiento militar de Marmal. Al día siguiente del suceso, lo que quedaba del edificio estatal de Mazar Hotel, fue demolido totalmente por los alemanes mediante tres detonaciones seguidas e incendiado.
A primera hora del viernes, otros dos trabajadores compatriotas, que se dirigían como todos los días a su trabajo para ganarse el pan, fueron blanco de los militares invasores alemanes y perdieron sus vidas.
La primera víctima fue Ziauldin, un joven de 21 años, que trabajaba desde bien temprano por la mañana hasta la noche en la sala de un restaurante donde se celebraban bodas. Él estaba prometido y, según declaraciones de su familia, se hubiera casado 25 días después. Pero los salvajes militares alemanes, basándose en sospechas de que podría ser un suicida, y en que no había hecho caso cuando se le advertía, le fusilaron brutalmente al amanecer, sin haber sido nada más que un trabajador como otros de nuestra patria cautiva.
Asimismo, el 11 de noviembre de 2016, sobre las 06:00h de la mañana, Enayatulah, de 22 años de edad, hijo de Agha Mohamed, fue convertido en mártir debido a los disparos de los soldados alemanes. Él era cocinero en el Hotel Marmarin y cada mañana iba allí a trabajar. Fue disparado desde una distancia de 500 metros. Enayatulah pertenecía a una familia pobre cuya madre, con los ojos llenos de lágrimas y la voz cargada gritaba:
“Enayatulah fue la única persona que mantenía a nuestra familia. Su padre es muy mayor. No puede trabajar y no tenemos a otra persona que se ocupe de nosotros. Hace dos años, se casó y ahora tiene un hijo. ¿Cómo podemos salir sin Enayatulah de tantos problemas y dificultades? Él, cada madrugada iba al hotel a trabajar, sin saber que los lobos salvajes estaban sedientos de la sangre de mi hijo. Le hicieron una emboscada y le asesinaron tal brutalmente que no bastó con un sólo disparo, sino que volvieron a disparar decenas de balas en su cuerpo agonizante hasta que Enayatulah murió inocentemente.”
Los familiares de Enayatulah piden justicia y dicen: “Este país no tiene ni puerta ni paredes. Cualquiera bajo el nombre de cualquier tema mata y comete crímenes, pero nadie interroga el por qué. Nosotros queremos condena para los asesinos de nuestros queridos.”